Horas cruciales para que los republicanos y demócratas intenten evitar un eventual cierre de Gobierno de los Estados Unidos
La política estadounidense tambalea este fin de semana, ya que el Congreso de la unión americana debe ponerse de acuerdo en cuanto a leyes de gasto público antes de la medianoche del sábado.
Si la instancia que hace parte del Poder Legislativo no llega a un acuerdo, como resultado el gobierno federal cerrará.
Aunque la denominada ‘resolución continuada’ permitiría la financiación del Gobierno sólo hasta el 17 de noviembre, tanto la Cámara de Representantes como el Senado del país norteamericano deben votar 12 proyectos de ley de gastos que resumen las normas de gasto de unos 6 billones de dólares en el próximo año fiscal.
Sin embargo, como ya ha ocurrido con anterioridad, los legisladores estadounidenses no se ponen de acuerdo para dar con las iniciativas necesarias para financiar el Gobierno federal y sus diferentes agencias.
Kevin McCarthy, presidente de la Cámara de Representantes (rama legislativa de mayoría republicana) busca promover una medida que exige fuertes recortes del gasto federal.
Mientras que el Senado (de mayoría demócrata) está tramitando un paquete de financiación que incluiría una ayuda económica a Ucrania.
Como se recordará, recientemente McCarthy y el presidente Biden alcanzaron un acuerdo bipartidista que evitó una eventual crisis presupuestaria.
No obstante, el tiempo se acaba, y es probable que durante estas horas cruciales los legisladores mantengan sus diferencias.
Referente al asunto, NTN24 habló con César Grajales, analista político, quien aseveró: “un cierre de gobierno no beneficia a nadie. Toca ponerse de acuerdo (demócratas y republicanos) en cuanto al presupuesto de la nación”.
“Muchos legisladores al cierre del año fiscal quieren aumentar el gasto público y no bajarlo (...) Cuando se desmenuza los proyectos de ley uno se da cuenta que hay cosas que no son tan relevantes para la sociedad estadounidense”, agregó.
¿A quién afecta el posible cierre del Gobierno?
La medida en cuestión podría afectar a los cuatro millones de empleados federales, incluidos los militares.
Además, el posible cierre amenaza a varios programas federales como préstamos a pequeñas empresas, ayuda a inquilinos de bajos ingresos, nutrición infantil y ayuda estudiantil.
