"Estamos ante un talento tocado por la varita mágica": el ciclismo se rinde a Pogacar tras ataque que marcó la historia en el Tour de Francia
El mundo del ciclismo vivió este viernes 19 de julio una jornada de época, de esas que serán recordadas en los libros y documentales, durante la etapa 19 del Tour de Francia que terminó en la estación de esquí de Isola 2000.
El esloveno Tadej Pogacar demostró este viernes que no hay ningún ciclista que le pueda competir.
Muchos pensaron que la ausencia de corredores de la talla del también esloveno Primoz Roglic, del belga Remco Evenepoel, y del danés Jonas Vingegaard en la última edición del Giro de Italia, explicaban el amplio margen con el que Pogacar ganó esa competencia.
La historia ha mostrado en este Tour de Francia que, en definitiva, Pogacar no tiene rival y que el ciclismo vive una nueva era: su era.
"Estamos ante un talento tocado por la varita mágica, que ya ha hecho historia, que nos regala exhibición tras exhibición. Quizás haya personas a las que les provoque aburrimiento. A mí para nada. Tenemos que disfrutar de un ciclista único como Tadej", afirmó el exciclista español, Alberto Contador, en medio de una transmisión de Eurosport, tras el ataque que este viernes hizo Pogacar.
El esloveno, a falta de unos nueve kilómetros para la línea de meta atacó, se despegó de sus principales competidores y uno a uno fue cazando a corredores que se habían fugado en medio de la etapa.
Finalmente, Pogacar ganó la etapa en la cual le sacó a sus principales rivales en la general, el belga Remco Evenepoel y el danés Jonas Vingegaard, un minuto y 42 segundos, en ese orden, y se encuentran ya a más de 5 minutos del maillot amarillo.
"Son diferencias importantes", admitió Pogacar, que el sábado recorrerá unas carreteras que le son familiares, ya que, como residente en Mónaco, suele entrenarse por ellas.
A dos días de la llegada final en Niza, el corredor esloveno cuenta ahora con un colchón de 5 minutos y tres segundos de ventaja sobre Jonas Vingegaard, ganador de las dos últimas ediciones del Tour y de 7:01 sobre Remco Evenepoel, que está también muy cerca de conquistar el maillot blanco de mejor joven de la carrera.
El sábado, la 20 etapa cuenta con sólo 132 kilómetros, pero con cuatro puertos y 4.600 metros de desnivel positivo en el programa, presenta un perfil susceptible de provocar daños, y ya sin apenas margen de reparación.