México elige presidente en medio de una grave situación de violencia electoral
Competir por votos en México se convirtió en una profesión de alto riesgo. A pesar de que los titulares de candidatos asesinados en el país tristemente se repiten, las cifras de violencia electoral no son claras ni unificadas y el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, está en negación.
Hasta el momento, 701 víctimas deja la violencia electoral en este país, según el más reciente balance elaborado por la consultora Integralia. Han asesinado a 225 políticos, 34 de ellos candidatos; además, se han presentado 17 secuestros, 21 desapariciones, 137 atentados y 218 amenazas.
Estas cifras fueron hasta el 27 de mayo de 2024, pero mientras se elaboraba este informe fueron asesinados dos candidatos más. Uno de ellos, Alfredo cabrera, a quien le dispararon en la cabeza casi en vivo en pleno mitin político.
Los asesinos en algunos casos ni esperan la complicidad de la noche para acabar con las aspiraciones de los candidatos, varios de los homicidios se han perpetrado a plena luz del día, como el de Gisela Gaytán, quien buscaba la alcaldía de Celaya por el oficialista partido Morena y le dispararon cuando se preparaba para encabezar un evento de campaña.
También han sido asesinados los familiares de los aspirantes políticos, incluso se han reportado descuartizamientos.
Varios atentados han terminado siendo masacres donde caen hasta menores, como sucedió en el ataque contra Lucero López Maza, candidata a la alcaldía de la Concordia, Chiapas.
La aspirante, de 28 años, fue asesinada junto a otras cinco personas.
Más de 500 candidatos a algún cargo de elección popular han solicitado y reciben protección del gobierno de México, incluidos los tres aspirantes a la Presidencia.
La democracia se ha teñido de sangre en la segunda economía de América Latina, donde más de 98 millones de personas están convocadas a las urnas este domingo 2 de junio.
