Diosdado Cabello "silenció" al influencer Irrael Gómez
"Enciendan notificaciones". Era el aviso que daba Irrael Gómez a sus seguidores de su cuenta de Instagram, de unos 2,6 millones, para conocer alguna denuncia en la que exponía a una persona o institución con fotos, nombres completos, sus cuentas de redes y conversaciones en capturas de pantalla.
Aunque comenzó con denuncias de abusos a mujeres y niños, luego se enfiló contra supuestos médicos o casos de mala praxis médica. Esto le llevó a sumar miles de fanáticos porque tras un solo post, el fiscal del régimen Tarek William Saab designaba fiscales y solicitaba detenciones, en un país con una impunidad superior al 92 por ciento.
Con la denuncia del supuesto agresor, las víctimas también eran expuestas y muchas encontraron en ésta la única vía para tener algo de justicia. Le enviaban a Irrael videos con sus testimonios, pruebas y audios que éste publicaba y se viralizaban de inmediato.
Irrael no podía ser cuestionado en su proceder porque también cazaba comentarios, buscaba el perfil del usuario y exponía sus fotos e información, como el caso de una mujer que lo criticó por “sobreexponer” a la hija que tiene con la presentadora Kerly Ruiz. En sus historias publicó cómo el esposo de la mujer le suplicaba perdón.
Ese poder mediático lo llevó a crear una plataforma llamada “periodismo descentralizado” que decía ir “donde nadie ha llegado” y ventilaba expedientes y documentos de instituciones del Estado.
Llevó a que la hospitalización del cantante Chyno Miranda fuera todo un suceso mediático con detenciones, imprecisión de datos, y hasta mudanza de recinto sin el consentimiento de su madre.
Pero hubo un giro en la conducta del autodenominado “gestor de crisis”, el día que denunció una “secta” que, según su periodismo, promovía el aborto en Venezuela, el pasado 30 de mayo.
Se trataba de una clínica clandestina donde practicaban la interrupción del embarazo; algo que en Venezuela constituye un delito a pesar de las miles de solicitudes de movimientos que promueven un debate para que el aborto sea considerado en circunstancias especiales y en manos de profesionales que no arriesguen la vida de la niña o mujer.
Esta vez había algo distinto en los comentarios.
Ese día se hizo tendencia en la red social Twitter y los comentarios iban sobre la exposición de personas, y la superficialidad con la que tocaba un tema tan profundo.
El considerado número dos del chavismo, Diosdado Cabello, comentó en su programa de los miércoles Con el Mazo Dando: "Yo vi por las redes... pusieron un influencer e inmediatamente actúa la policía ¿Qué vaina es esa? Que alguien actúe porque un influencer señale a una persona y señale a otro y los organismos inmediatamente se activan".
"¿Como que nos importa más eso a lo que piense el pueblo?. Nosotros no estamos aquí para eso, para que alguien denuncie en las redes y entonces hay que hacer lo que diga el influencer porque ese es su negocio, eso no es así.
Esa afirmación del temido Diosdado fue suficiente para silenciar a Irrael Gómez. No hubo más denuncias ni exposición de agresores o falsos profesionales.
Irrael, quien en el pasado es acusado de ser el responsable de entregar al régimen la ubicación exacta del rebelde Óscar Pérez cuando fue asesinado, se limita a exhibir sus lujos y fotografías de la modelo que hoy por hoy es su pareja sentimental, Claudia Baseggio.
El autor del libro Manipúlame se dice creador de una fórmula para detectar manipuladores “enfrentarlos, controlarlos o convertirte en uno”.