Hunter Biden, hijo del presidente de Estados Unidos, fue acusado por porte ilegal de armas
Hunter Biden, hijo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, fue acusado este jueves por porte ilegal de armas.
Según la investigación, el primogénito del mandatario fue inculpado formalmente por dos cargos por mentir en una declaración jurada de que no consumía drogas cuando adquirió, hace cinco años, un revólver Colt en Delaware, su lugar de nacimiento.
Este nuevo revés para la campaña de Joe Biden a la Presidencia ocurre días después de que su hijo y el fiscal especial del Departamento de Justicia David Weiss no llegaran a un acuerdo.
En junio, Hunter había llegado a un acuerdo con la Fiscalía tras admitir su responsabilidad por evasión de impuestos federales y por violación de la legislación sobre porte de armas relacionada con el pasado de alcoholismo y consumo de drogas, según informó el fiscal David Weiss.
En ese entonces, cambio se le ofreció libertad condicional, ya que ya había pagado lo que debía al gobierno junto con las sanciones.
Semanas después, el acuerdo colapsó y el fiscal Weiss anunció nuevos cargos en otros estados.
Por su parte, la Casa Blanca emitió un escueto comunicado sobre la situación:
"El presidente y la primera dama aman a su hijo y lo apoyan mientras sigue reconstruyendo su vida. No tendremos más comentarios".
En contraste, el expresidente Donald Trump aseguró que el hijo de Biden solo había recibido una "multa" y acusó al sistema judicial de estar "roto".
Esta no es la primera polémica que envuelve a Hunter, pues se le conoce por ser un asiduo consumidor de drogas, por portar unas 9.000 fotografías íntimas con contenido sensible y por cuestionados negocios con China y Ucrania.