Niño de origen hondureño no reconoció a su madre tras haber sido separados en la frontera
Lo que debería haber sido un momento reconfortante para una familia migrante que fue separada en Texas se transformó en una escena amarga para sus padres. La madre, de origen hondureño, rompió en llanto cuando después de tres meses logró reunirse finalmente con su hijo de tres años y éste no la reconoció.
El video, que fue grabado a finales de julio, fue difundido en redes sociales por la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles, ACLU, por sus siglas en inglés. En la publicación la organización alertó sobre las consecuencias de la política migratoria tolerancia cero, que ha provocado la separación de decenas de familias.
La doctora Mónica Oganes, psicóloga escolar y directora del comité de neuropsicología educativa de la Asociación de Psicólogos Escolares de Florida, habló de este caso en el programa La Tarde de NTN24.
Explicó que durante los primeros tres años de vida se tiene que dar una vinculación entre padres e hijos y que al ser separados “los niños entran en un trauma debido al miedo, tristeza que ellos sienten al estar en un ambiente que no es el suyo, al sentirse inseguros”.
“Cuando hay un corte con esa vinculación y con los padres al volver a reintegrarse dependiendo de lo que ha pasado con ellos puede mostrarse un cuadro como el que estamos viendo”, sostuvo la experta.
Respecto a los efectos que esta separación puede tener en los niños pequeños, dijo que “lo que vamos a observar es que continúan ellos con ese aislamiento, esa especie de vigilancia congelada, ellos ya no están seguros de su ambiente entonces están observando el medioambiente, se ven como conmocionados, a veces están entumecidos, pueden llegar a retroceder, a chuparse los dedos, estar en posición fetal, cosas que uno piensa que son de niños menores”.
Además, aseguró que “el problema de este tipo de trauma es que va a tal nivel que tiene un rezago de décadas, si es que no hay una intervención temprana y definitivamente lo que deberíamos hacer es evitar que esto suceda porque deberíamos buscar maneras de solucionar este problema sin tener que causar estos traumas en los niños y en las familias porque los padres también se trauman y esto tiene un efecto en la familia”.