¿Lensa, la aplicación para crear avatares digitales es un problema de ciberseguridad?
Recientemente se ha vuelto viral en redes sociales el nombre de Lensa, una aplicación de inteligencia artificial (IA) que permite que los usuarios puedan convertir sus fotos en avatares digitales que van desde princesas de cuento hasta seres celestiales.
Dicha app se volvió tendencia en las diferentes plataformas, entre ellas Tik Tok e Instagram. Si quiere crear su avatar digital, lo primero que tiene que hacer es descargar la aplicación (cuyo costo es de 35.99 dólares, pero puede usar la prueba gratis por 7 días). Luego de esto, Lensa les recomienda a los usuarios tomarse entre 10 a 20 fotos para tener un mejor resultado. De ese modo, las instantáneas deben de ser en primeros planos de su cara y debe tener diferentes fondos, ángulos y expresiones faciales.
Lo que no se dice en redes sociales es que la generación de los avatares requiere de una tarifa adicional, por eso si la persona obtiene la suscripción o tiene la prueba gratuita puede acceder a 50 avatares distintos por precios que van desde los 3.99 dólares hasta los 7.99 dólares.
¿Cuáles son los problemas de ciberseguridad que tiene Lensa?
La plataforma puede cambiar o hacer ver a los cibernautas completamente diferentes a como lucen en realidad no solo ha logrado impactar en las redes sociales sino que también consigue preocupar a los expertos en privacidad.
Pese a que la aplicación aclara desde el momento de su instalación que hace parte de una iniciativa que fue diseñada para ser usada por personas mayores de 13 años, para los expertos en seguridad cibernética Lensa es un problema de seguridad.
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Pero, ¿qué hace que la aplicación sea considerada como un problema? Según los términos y condiciones de Lensa, una vez que el cibernauta descargue la aplicación y comience a subir fotos, el usuario está accediendo a los derechos sobre sus imágenes.
“Licencia perpetua, irrevocable, no exclusiva, libre de regalías, mundial, totalmente pagada, transferible y sublicenciable para usar, reproducir, modificar, distribuir, crear trabajos derivados de su Contenido de usuario, sin ninguna compensación adicional para usted y siempre sujeto a su consentimiento explícito adicional para dicho uso cuando así lo exija la ley aplicable”, son las pautas solicitadas por la plataforma de inteligencia artificial.
Es decir que, aparte de hacer uso de las fotografías que se cargan en su interfaz, Lensa tiene el derecho absoluto sobre las fotos que se producen en su sistema para poder hacer de ellas lo que quiera sin necesitar de la autorización del internauta.
Otro problema que ha sido detectado por los expertos en seguridad cibernética es que pese a que la aplicación sugiere subir fotos en las que se vea principalmente el rostro y recomienda no subir retratos de menores, la inteligencia artificial de la app va mucho más allá.
Lensa asegura que los términos de su servicio instruyen a que los usuarios envíen solo contenido apropiado que no contenga desnudos y también prohíbe las imágenes de niños.
A pesar de las advertencias, algunas mujeres que han utilizado la plataforma para crear avatares se han dado cuenta rápidamente que incluso cuando suben fotos netamente de sus rostros la Lensa no solo genera desnudos sino que también las transforma en caricaturas “sexualizadas” en incluso llega a cambiar sus rasgos, entre ellos su piel, embellecer la imagen.
Lensa señala entre su información de seguridad que podrían compartir los datos con otras organizaciones o empresas como: la dirección de correo electrónico, ID de usuario, la interacciones en la app, los registros de fallas y diagnósticos.
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“Funciones de la app, Comunicaciones del desarrollador, Publicidad o marketing y Administración de la cuenta”, son algunos de los datos que serían compartidos por la app.
En su política de privacidad Lensa especifica que los datos personales de los usuarios se pueden “transferir, compartir, vender o proporcionar los Datos faciales a plataformas publicitarias, proveedores de análisis, corredores de datos, revendedores de información u otras partes similares”.
Entretanto, agrega que de todos modos las fotos usadas y subidas en su interfaz se elimina por completo en un lapso de 24 horas.