Alemania califica de motivo "político" el corte de gas de Gazprom
La decisión del gigante energético ruso Gazprom de cortar el suministro de gas natural a Europa a través del gasoducto Nord Stream fue "política", dijo el miércoles el ministro de Economía alemán.
Gazprom anunció el martes que reduciría las entregas a través del gasoducto en alrededor de un 40% debido a la "reparación" de las unidades de compresión por parte de la empresa alemana Siemens.
La medida de Gazprom fue "una decisión política y no una decisión técnicamente justificable", dijo el ministro de Economía, Robert Habeck, en una rueda de prensa.
Habeck dijo que Alemania era consciente de la necesidad de realizar el mantenimiento del gasoducto, pero añadió que "la primera serie de trabajos de mantenimiento en los que esto hubiera sido relevante no tendrá lugar hasta el otoño".
Al mismo tiempo, esos trabajos no justificarían una reducción "del orden del 40%", dijo Habeck.
Gazprom dijo el martes que el retraso en el retorno de los componentes significaba que sólo tres unidades de bombeo de gas estaban actualmente operativas en la estación de compresión de Portovaya, cerca de la ciudad rusa de Vyborg, donde comienza el gasoducto.
Alemania estaba vigilando el impacto en el mercado del gas, pero no había "ningún problema de suministro en Alemania", dijo Habeck.
Varios países europeos, entre ellos Alemania, dependen en gran medida del suministro de gas ruso para sus necesidades energéticas.
Desde el inicio de la guerra, los países europeos han tratado de reducir su dependencia de las importaciones de Rusia, pero están divididos sobre la imposición de un embargo al combustible.
Moscú ya ha cortado el suministro a varios clientes europeos después de que éstos no cumplieran con la exigencia rusa de que todos los países "no amigos" pagaran el gas natural en rublos, en respuesta a un aluvión de sanciones occidentales por Ucrania.
Polonia, Bulgaria, Finlandia y los Países Bajos han visto suspendidas sus entregas tras rechazar el acuerdo.
El gasoducto Nord Stream, puesto en marcha en 2012, va de Rusia a Alemania por debajo del mar Báltico.
Un segundo gasoducto submarino, el Nord Stream 2, que iba a duplicar las entregas, fue detenido por Alemania en el período previo a la invasión rusa de Ucrania.