Estados Unidos demanda a Apple por prácticas monopólicas con sus iPhone
El Departamento de Justicia de Estados Unidos demandó este jueves a Apple por mantener ilegalmente un monopolio en el mercado de 'smartphones' con sus iPhone, al ahogar la competencia e imponer altos costos a los consumidores.
"Si la situación no cambia, Apple solo continuará fortaleciendo su monopolio en los smartphones (teléfonos inteligentes en inglés)", señaló el fiscal general Merrick Garland en una declaración tras ingresar el caso a una corte federal de Nueva Jersey.
"Los consumidores no deberían tener que pagar precios más altos porque las compañías violan las leyes antimonopolio", agregó Garland.
Apple advirtió de su lado que, si tiene éxito, la demanda podría "sentar un peligroso precedente, dándole poder al gobierno para incidir fuertemente en el diseño de la tecnología que utilizan las personas", según un comunicado.
Este caso, ampliamente anticipado, enfrenta a la compañía fundada por Steve Jobs con Washington tras eludir el escrutinio del gobierno federal por casi medio siglo.
Cabe mencionar que Apple fue muy criticado en estos últimos años por obligar a otras empresas a utilizar su tienda de aplicaciones y a pagar comisiones importantes sobre todas las transacciones.
La empresa es acusada de imponer condiciones restrictivas a firmas que proponen servicios en iPhone e impedirles, en particular, crear su propia boutique de aplicaciones para monetizar (ganar dinero) directamente su contenido.
Sin embargo, esta acción judicial abarca también otros aspectos del ecosistema de los iPhone, según el documento publicado por el Departamento de Justicia.
"Todas las decisiones adoptadas por Apple establecieron y reforzaron las defensas que protegen su monopolio en el terreno de los smartphones", argumenta el gobierno, que se asoció a fiscales de varios estados en esta causa.
Con este procedimiento Apple perjudicó "a los usuarios, los desarrolladores y otras partes que contribuyeron a hacer de iPhone lo que es hoy", añade el documento judicial.
Según la demanda, las reglas y decisiones adoptadas por Apple fueron diseñadas para forzar a los usuarios a permanecer en su ecosistema y comprar el costoso hardware de la empresa, esto es, el iPhone.
El Departamento de Justicia argumenta que el grupo impidió o perturbó la creación y la oferta de servicios que pudieran utilizarse en teléfonos inteligentes de la competencia, e incluso pasar fácilmente de uno a otro.
Evoca, por ejemplo, servicios de "streaming" en iPhone, pero también billeteras digitales que podrían utilizarse en varias plataformas.
Apple también, siempre según la presentación oficial, obstaculizó el desarrollo de servicios de mensajería pasibles de ser utilizados en varios soportes.
El fiscal general puso el ejemplo del sistema de mensajería de Apple, iMessage, donde las conversaciones con smartphones de otras marcas no estaban encriptadas, al contrario de lo que ocurría con los intercambios entre dos iPhone.
En consecuencia, "los usuarios de iPhone tienen la impresión de que los teléfonos de la competencia son de menor calidad (...) cuando es Apple el responsable" de estas funcionalidades degradadas.
El gobierno señala que se apoyó en documentos internos que demuestran que la empresa californiana actuó conscientemente para limitar la competencia y las innovaciones que podían amenazar su modelo económico.
El caso señala prácticas que, según el Departamento de Justicia, hacen más rica a Apple en detrimento de la innovación.
Apple niega los cargos y alega que es un caso "equivocado en los hechos" y en sus fundamentos legales. "Nos defenderemos vigorosamente".
"Esta acción judicial amenaza lo que somos y los principios que distinguen los productos de Apple en un mercado ferozmente competitivo", reaccionó la empresa en una declaración transmitida a la AFP.