México celebra el Día de Muertos en medio de las afectaciones que dejó el huracán Otis en Acapulco
Este 2 de noviembre, México celebra una de sus festividades más emblemáticas y significativas: el Día de Muertos, una tradición en donde se hacen homenajes a los seres queridos y conocidos que ya no se encuentran en el mundo terrenal.
Dicha celebración, que se remonta a la época prehistórica en donde el rito a los muertos y los santos es una parte fundamental de la cultura de la nación norteamericana, tiene como fin organizar una fiesta para guiar el alma de los seres queridos fallecidos al famoso Mictlán, el más allá de los mexicanos.
Los altares y algunas de las tumbas se decoran con la famosa flor de ‘cempasúchil’, la cual impregna el aire con su fuerte olor y que ayuda a atraer a los muertos.
La tradición, que ha maravillado a gran parte del mundo, no pasó desapercibida, pues este año México recibió el Día de Muertos en medio de una tragedia: el paso del huracán Otis que deja hasta el momento más de 40 personas muertas y al menos 58 desaparecidos.
Mientras la mayoría de los estados mexicanos rindieron tributo a sus muertos, la celebración en Acapulco pasó desapercibida debido a los destrozos y daños que ha dejado el ciclón que tocó el estado como categoría 5.
Los panteones quedaron inutilizables, por lo que los familiares del estado no pudieron visitar, ni rendirles homenajes a sus muertos, así como también hay quienes aún tienen dificultades con el tema de la electricidad, el agua, la seguridad y los alimentos.
El encargado del panteón municipal de Acapulco, Santiago Escutia, le comentó al medio Milenio que en otros años, entre el 1 y 2 de noviembre (cuando se celebra el Día de Muertos), “tenemos arriba de 100 mil visitantes, es una feria: está lleno, chocas con la gente, aquí tienes tu relleno, tu chilate, tus bolillos”.
“Hoy la diferencia es muchísima, no tenemos ni el uno por ciento de lo que se ha acostumbrado año con año, es mediodía y han llegado 50 personas, ¡ahorita no tenemos nada, nada, nada!”, añadió.
Esta sería la primera vez en su historia, que en Acapulco la significativa tradición del Día de Muertos pasa totalmente desapercibida en el estado mexicano.
Sin embargo, esto no ha evitado que algunas personas en otros estados del país le rindan homenaje a las víctimas que ha dejado a su paso el huracán Otis.