Asesinó al verdugo que la violó, maltrató y prostituyó: Ahora enfrenta juicio
Fue violada, maltratada y obligada a prostituirse: Una mujer de cuarenta años, que se ha convertido en el nuevo símbolo de la violencia conyugal en Francia, será juzgada por haber matado a su presunto verdugo.
Valérie Bacot confesó que durante 25 años vivió un verdadero calvario al ser abusada por su padrastro, quien luego se convirtió en su marido. El 13 de marzo de 2016, la mujer asesinó a Daniel Polette, de 61 y con la ayuda de sus dos hijos, enterró su cuerpo en el bosque.
En octubre de 2017, fue denunciada y detenida y ahora enfrenta un juicio que inicia este lunes en una corte de Saône-et-Loire, en el centro de Francia. Cerca de 600.000 personas han firmado una petición para exigir la liberación de esta mujer que narró el infierno que vivió durante años en un libro.
A los 12 años fue violada por Daniel Polette, que era entonces el amante de su madre. Condenado y encarcelado en 1995, la justicia le autorizó, a su salida de la cárcel, a volver a la casa familiar. "Todo volvió a empezar como antes", cuenta Bacot en su libro publicado el mes pasado.
Cuando se quedó embarazada a los 17 años, su madre la echó de la casa y Valérie Bacot no tuvo más remedio que instalarse con "Dany".
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Pero el hombre, que bebía mucho alcohol, se mostraba cada vez más violento. Una Navidad la golpeó con un martillo porque una guirnalda que compró no funcionaba. Otro día la estranguló hasta que se desmayara, pese a estar embarazada, cuenta la acusada.
Según Bacot, a esta violencia física cotidiana, "usual", se añadió la prostitución que su marido le impuso en la parte trasera de su auto. Él le daba "instrucciones" a través de un auricular para satisfacer mejor al cliente.
"Tenía miedo todo el tiempo. Quise huir mil veces", asegura la acusada. Pero temía no poder escapar de su marido violento, que la amenazaba regularmente con una pistola.
El detonante fue el miedo a que su hija Karline corriera la misma suerte cuando, a los 14 años, le confesó que su padre le preguntó "cómo era sexualmente".
El 13 de marzo de 2016, tomó la pistola que su marido guardaba en su vehículo y le disparó en la nuca. No pudo invocar la defensa propia porque este último estaba conduciendo y le daba la espalda.
Sus abogados explican su acto por la "violencia extrema que sufrió durante 25 años y el miedo a que se repita contra su propia hija".
Redacción NTN24 / Información AFP
