"Parte de lo que nos propusimos fue tener la voz de ellos": director del documental de Netflix ‘Los hermanos Menendez’ en diálogo con NTN24
NTN24 conversó con el director argentino Alejandro Hartmann, responsable de dirigir el exitoso documental de Netflix ‘Los hermanos Menendez’, una pieza cinematográfica en la que Lyle y Erik Menedez hablan sobre el caso por el que fueron sentenciados a cadena perpetua por el asesinato de sus padres.
Con 18 y 21 años en el momento de los hechos, ambos hermanos declararon entre lágrimas que habían matado a sus padres tras sufrir años de abusos sexuales a manos de su papá.
Tras ello, Lyle y Erick fueron condenados por asesinato y cumplen cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional desde 1996.
El documental de Netflix cuenta la historia de los dos hermanos, desde las voces de los propios protagonistas, y se ha convertido en todo un éxito en la plataforma de streaming, logrando conseguir ser top diez entre las series más vistas y ser número uno en 81 países.
Ante el fenómeno que está suponiendo este documental, Hartmann le comentó al canal de las Américas que cuando fue contratado para dirigir la pieza cinematográfica se dio cuenta de que ya existían otros documentales sobre los hermanos Menendez.
Por lo cual, esto supuso el reto de hallar un nuevo enfoque, que a la vez pudiera mostrar la vigencia del tema.
“Siempre tuvo una vigencia porque es un caso excepcional. Entonces parte de lo que nos propusimos fue darle algo nuevo desde el día de hoy, lo que pasó en 2020 con el movimiento de TikTok a favor de ellos, partiendo de este presente y volver al pasado. Y tener la voz de ellos, esto nos parecía fundamental”, explicó.
El cineasta argentino también habló sobre lo que podría pasar en el caso de los hermanos Menendez.
“A veces la justicia va de la mano de la sociedad y sigue los lineamientos de la sociedad y otras veces no”, por lo que, “esta mirada respecto al abuso sexual ya existía en ese entonces, creo que con la mirada actual y como hemos progresado en ese campo sin duda puede que haya un cambio para ellos”, afirmó.
Hartmann comentó que más que lograr convencerlos para que hablaran sobre su caso, lo que pasó es que tanto Lyle como Erik sintieron que era el momento de contar su historia bajo la mirada de otra persona.
“No puedo hablar por los hermanos, puedo decir la impresión que yo tengo. Para ambos, en especial para Lyle, era momento de hablar, eso me lo dijo. Él no hablada desde hace casi 30 años, entonces era su momento”, puntualizó.
El director de cine hizo énfasis en que “en cambio, Erik sí había hablado”. “A Lyle creo que le interesó el hecho de que yo no fuese norteamericano, que no viviese en Estados Unidos y que tuviera una mirada distinta. Eso a él lo tranquilizaba en algún sentido”.
“En algún momento tuve esa conversación. Por Lyle fue que Erik aceptó, porque Lyle le dijo que yo quizás preguntaba distinto o tenía una mirada respecto a lo que él suponía que los medios pudieron tener”, añadió.
