Disputa entre los raperos Drake y Kendrick Lamar tomó giro y llegó a los tribunales de EE. UU.
La disputa entre el rapero canadiense Drake y el estadounidense Kendrick Lamar parece que tomó un nuevo giro y llegó a los tribunales de EE. UU., ya que el primero decidió acusar al sello discográfico Universal Music de conspirar para inflar los números de streaming de la estrella del de California y de difamación, según unos documentos legales.
Los raperos, quienes han estado enfrascados durante mucho tiempo en una guerra de palabras en sus canciones, aumentaron drásticamente sus tiraderas este año con "pistas de disidencia" vitriólicas criticando al otro.
Precisamente, "Not Like Us" de Lamar, que acusó a Drake de tener relaciones con chicas menores de edad, gozó de un gran reconocimiento comercial y de la crítica, superando los 900 millones de reproducciones en la plataforma Spotify y obteniendo múltiples nominaciones al Grammy, incluida la de canción del año.
Sin embargo, Drake acusó a Universal Music Group (UMG), que distribuyó la canción, de cobrar a Spotify precios inusualmente bajos por la licencia de la canción, a cambio de que el transmisor recomendara ampliamente la canción a sus suscriptores.
El rapero, quien fue el de mayor ingresos del mundo el año pasado, también acusó a UMG de utilizar "bots" informáticos automatizados para inflar artificialmente el supuesto número de veces que la canción se transmitió en la plataforma, según un documento judicial presentado en Nueva York.
En otra petición, que fue presentada en Texas y reportada por primera vez por el sitio de música Billboard, el rapero canadiense afirmó que UMG sabía que la canción contenía "material ofensivo", pero la distribuyó de todos modos, sin insistir en ningún cambio o edición de su letra.
"UMG diseñó, financió y luego ejecutó un plan para convertir 'Not Like Us' en un megaéxito viral con la intención de utilizar el espectáculo del daño a Drake y sus negocios para generar histeria entre los consumidores y, por supuesto, ingresos masivos", dice la petición.
Pese a que ninguna de las acciones legales son demandas ni son acusaciones formales de fraude o difamación, podrían utilizarse en una demanda en una etapa posterior dadas las pruebas recogidas en ambas peticiones.
Ante los señalamientos, un portavoz de UMG dijo mediante una declaración enviada por correo electrónico que "la sugerencia de que UMG haría algo para socavar a cualquiera de sus artistas es ofensiva y falsa".