Las reacciones políticas a los disturbios que se presentaron en el Congreso de Nuevo León
Una sesión en el Congreso de Nuevo León en México terminó en disturbios, en momentos en que se debatía la designación del gobernador interino para suplir las funciones de Samuel García, ahora precandidato presidencial.
Un grupo de simpatizantes del partido político Movimiento Ciudadano ingresó a la fuerza al recinto y, según los reportes, lanzaron bombas de humo para mostrar su inconformidad por la designación de un interino ajeno al Partido Naranja.
García, gobernador en licencia, señaló a militantes del partido Revolucionario Institucional PRI y del partido de Acción Nacional PAN de estar detrás de las acciones para frenar la designación del suplente.
El desorden requirió la intervención de las autoridades y finalmente fue designado el vicefiscal del ministerio público, Luis Enrique Orozco, como gobernador interino, obligación que cumplirá a partir del dos de diciembre y hasta el dos de junio de 2024.
Tras el incidente, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, calificó el hecho como una afrenta al precandidato presidencial Samuel García.
“Mucho enojo y coraje contra Samuel. Ellos se sienten dueños de la clase media”, dijo el mandatario.
Por su parte Xóchitl Gálvez Ruiz, candidata a la Presidencia, indicó que “la irresponsabilidad y la ambición política del gobernador tienen a Nuevo León en la ingobernabilidad”.
“El ataque contra el Congreso de Nuevo León atenta contra el pueblo, la democracia y el orden constitucional. Señor gobernador: deje los caprichos personales y obedezca la ley. Deje las ambiciones y mejor haga bien su trabajo que para eso lo eligieron”, recalcó.
Asimismo, el presidente del partido Acción Nacional, Marko Cortés, rechazó los actos violentos que "vulneran la paz y autonomía del Poder Legislativo".
“Nuestro respaldo a las y los legisladores locales de Nuevo León que hicieron valer el voto popular y con valentía defendieron la división de poderes”, afirmó en sus redes sociales.
