Exasesora de Donald Trump testificó en el juicio penal del expresidente en Nueva York: "Estoy muy nerviosa"
La exsecretaria de prensa de la campaña de Donald Trump, Hope Hicks, se convirtió este viernes en la primera exmiembro del círculo íntimo del expresidente en subir al estrado de los testigos en su histórico juicio penal.
"Estoy muy nerviosa", dijo Hicks mientras Trump, sentado a pocos metros de distancia, la miraba fijamente, según medios internacionales.
Hicks estuvo involucrada en las etapas finales de la campaña de Trump para la Casa Blanca cuando supuestamente se realizaron pagos para comprar el silencio de la exactriz de cine para adultos, Stormy Daniels, con la que habría tenido una relación extramatrimonial.
Trump está acusado de falsificar registros comerciales para reembolsar a su abogado, Michael Cohen, un pago de 130.000 dólares a Daniels pocos días antes de las elecciones de 2016 contra Hillary Clinton.
El juicio, el primero de un expresidente de Estados Unidos, y sus revelaciones han conmocionado al establishment legal y político mientras Trump busca recuperar la Casa Blanca de manos del presidente Joe Biden en las elecciones de noviembre.
"Informé al señor Trump" durante la campaña de 2016, dijo Hicks al tribunal el viernes, describiéndolo como "muy involucrado".
Cabe mencionar que Hicks fue mencionada en un testimonio anterior de David Pecker, exeditor del tabloide National Enquirer, que ha sido clave en el caso de la fiscalía contra Trump.
Dijo que Hicks estuvo presente en una reunión de 2015 en la Torre Trump en Nueva York en la que acordó ayudar en la naciente campaña de expresidente para la nominación republicana el año siguiente. Ella dijo que no recordaba el encuentro.
A principios de esta semana, los fiscales instaron al juez Juan Merchán a multar a Trump por más violaciones de una orden de silencio impuesta para proteger a los participantes del juicio.
Merchan, quien amenazó a Trump con ir a prisión el martes por nuevas violaciones de la orden de silencio, escuchó los argumentos de ambas partes y podría emitir un fallo el viernes.
El juez comenzó la sesión del viernes dirigiéndose inusualmente directamente a Trump, diciendo que quería "aclarar (cualquier) malentendido" sobre la orden de silencio.
Merchan destacó que Trump tenía "derecho absoluto a testificar" ante el tribunal, y que la mordaza "sólo se aplica a declaraciones extrajudiciales fuera de los tribunales".
Trump, quien había afirmado que la orden de silencio significaba que no podría testificar libremente, respondió "gracias".
El juez Juan Merchan, de origen colombiano, impuso al exmandatario una multa de 9.000 dólares y le lanzó un ultimátum: podría enviarlo a la cárcel si lo vuelve a hacer.
En total fueron nueve violaciones de la orden que había recibido de no atacar al tribunal, es decir, por cada infracción recibió una multa 1.000 dólares y se le ordenó retirar, a más tardar este martes por la tarde, "los comentarios ofensivos" en su red social a Truth Social y en la página web de su campaña.