"Es una purga de proporciones históricas": abogado en derecho constitucional alerta sobre los riesgos de la reforma judicial propuesta en México
Andrés Manuel López Obrador brindó su último informe de gobierno en el que defendió su legado y los avances que logró su gestión en materia de salud, economía y educación.
Sin embargo, su papel en la política mexicana despertó críticas de distintos sectores, como la más reciente propuesta de una reforma judicial, que tendrá que seguir defendiendo Claudia Sheinbaum, entre otras reformas que dejó en marcha el mandatario.
Lo anterior desató una serie de protestas de distintos sectores, incluidos estudiantes que ven peligrosa la iniciativa de que los jueces sean elegidos por voto popular.
Precisamente, la tarde de NTN24 habló con Javier Martín Reyes, abogado en derecho constitucional y electoral sobre los riesgos que implica la reforma que promueve AMLO.
"La reforma judicial es un riesgo de perder un capital humano que se ha formado por décadas. En México hemos sido poco exitosos en construir carreras de servidores públicos (...) Y una de las carreras judiciales que funcionan bien en México es la carrera judicial a nivel federal", comentó.
El invitado enfatizó que los jueces y juezas que han sido elegidos por el sistema actual se sometieron a una evaluación rigurosa y basada en el mérito a pesar de los problemas que tiene el país.
"Lo que pretende esta propuesta es una purga de proporciones históricas. Nunca habíamos visto que se pretendiera destituir a todos los integrantes de la Corte, a la mitad de jueces y magistrados a nivel federal".
El invitado alertó que lo que pretende el gobierno es que el poder judicial quede bajo el control de los órganos políticos y quedaría en riesgo la división de poderes.
"No hay en la actualidad ninguna judicatura en el mundo que tenga un método de elección de este tipo. La iniciativa dice que se inspira en Bolivia que ha demostrado ser un fracaso absoluto en la elección de jueces", comentó.
Javier Martín Reyes explicó que los jueces no pueden servir a intereses partidistas y deben estar capacitados para arbitrar los problemas sociales que hay en México.
"Los árbitros tienen que ser imparciales y tienen que estar técnicamente capacitados", acuñó.