Empresa japonesa perdió contacto con sonda espacial que aterrizaría en la luna
Este martes, fracasó el intento de una empresa japonesa que pretendía convertirse en la primera compañía privada en alunizar una sonda tras perder contacto con el módulo enviado al espacio.
"Hemos perdido la comunicación" con la sonda del programa Hakuto-R (conejo blanco en japonés), por lo cual "debemos asumir que no hemos podido completar el descenso en la superficie lunar", indicó Takeshi Hakamada, fundador y director general de la firma ispace.
"Nuestros ingenieros seguirán analizando la situación", añadió.
La nave, que orbitaba desde hacía un mes a unos 100 km del satélite terrestre, empezó la operación, enteramente automática, que debía llevarla hasta el suelo lunar hacia las 4:40 p.m. (hora local) de este martes.
A tan solo unos minutos del alunizaje, el equipo que controlaba desde tierra el trayecto de la sonda perdió el contacto, por lo que los minutos después tuvieron que admitir que le habían perdido el rastro.
El directivo aseguró, además, que Ispace mantendría sus "esfuerzos para futuras misiones".
La sonda del programa Hakuto-R finalmente no llegó a su destino, a pesar de los esfuerzos y la emoción que generaba entre los especialistas japoneses. La sonda fue lanzada en diciembre pasado desde la base de Cabo Cañaveral, en Florida (EEUU), por un cohete de SpaceX.
La sonda transportaba varios róveres lunares, incluido un modelo en miniatura japonés de apenas ocho centímetros.
Cabe recordar que en 2019 un módulo de la empresa israelí, SpaceIL, se estrelló contra la superficie lunar, con lo cual el éxito de la operación no estaba garantizado.
La misma suerte corrió ese mismo año una sonda india, denominada Vikram.
Con solo 200 empleados, Ispace explica que "quiere extender la esfera de la vida humana al espacio y crear un mundo sostenible suministrando servicios de transporte de alta frecuencia y bajo coste a la Luna".
Hakamada asegura que la misión sienta "las bases para liberar el potencial de la Luna y transformarla en un sistema económico robusto y vibrante".
La empresa cree que el satélite terrestre podría acoger una población de 1.000 personas en 2040, además de 10.000 visitantes anuales.