Una mujer fue hallada viva bajo los escombros tras 91 horas del terremoto en Birmania
En la mañana de este martes los bomberos de Birmania confirmaron el rescate de una mujer de unos 63 años que fue hallada después de estar atrapada durante 91 horas entre los escombros tras el terremoto del viernes.
La mujer "fue encontrada viva" el martes por la mañana en la capital, Naipyidó, "rescatada con éxito" y trasladada al hospital una hora después, indicó el servicio de bomberos en Facebook.
Mientras tanto, la junta militar que lidera al país declaró que se han confirmado más de 2.000 muertos, más de 3.900 heridos y 270 desaparecidos, además, al menos 20 personas murieron en la vecina Tailandia.
En Bangkok, la gran mayoría muertos se dio cuando se derrumbó un rascacielos de 30 pisos en construcción.
Por su parte, cuatro días después del terremoto de magnitud 7,7 que azotó Myanmar, muchas personas aún duermen a la intemperie, ya sea por no poder regresar a sus casas en ruinas o por temor a nuevas réplicas.
En la mañana, el país entero guardó un minuto de silencio el martes en homenaje a las víctimas del catastrófico fenómeno que deformó carreteras y derribó edificios en lugares tan lejanos como Bangkok.
Las sirenas sonaron a las 12:51:02 (hora local), misma hora del sismo, paralizando al país para recordar a los perdidos.
Mandalay, la segunda ciudad más grande del país, con 1,7 millones de habitantes, sufrió una de las peores destrucciones.
Más de 1.000 rescatistas extranjeros han llegado para ayudar y los medios estatales de Myanmar informaron que casi 650 personas han sido rescatadas con vida de edificios en ruinas en todo el país.
No obstante, el nivel de apuro de la búsqueda ha disminuido mientras pasan las horas.
A las afueras de Mandalay, un crematorio ha recibido cientos de cuerpos para su eliminación, y muchos más llegarán a medida que las víctimas sean extraídas de los escombros.
Un oficial indio que llegó como voluntario aseguró que afuera de los edificios olor era muy fuerte. El hedor de los cuerpos pudriéndose por el calor era inconfundible en varios puntos del desastre de la ciudad.