Régimen de Nicaragua acusó formalmente a monseñor Rolando Álvarez de conspiración
La Justicia del régimen de Daniel Ortega acusó formalmente al obispo nicaragüense Rolando Álvarez por los delitos de conspiración y propagación de noticias falsas.
Según el Complejo Judicial Central de Managua, a monseñor Álvarez se le acusa de conspiración para “cometer menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas a través de las tecnologías de la información y la comunicación en perjuicio del Estado y la sociedad nicaragüenses".
Al respecto, Martha Patricia Molina, abogada y defensora de derechos humanos en Nicaragua, señaló que la decisión hace parte de un proceso “antijurídico e ilegal” que se desarrolla en el país.
“Esta nueva etapa de criminalización en contra de los clérigos se ha caracterizado por elaborar juicios antijurídicos en contra de los sacerdotes”, señaló.
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Asimismo, Molina hizo énfasis en que monseñor Rolando Álvarez fue detenido sin orden judicial y sin la posibilidad de comunicarse con su familia pese a que las leyes del país lo permiten.
“Ahora el Estado le está imponiendo una defensa técnica pública y no le permite escoger un abogado de plena confianza”, indicó la especialista, por lo que catalogó la situación del religioso como un estado de “indefensión total”.
Finalmente, la abogada sostuvo que monseñor Álvarez “tendrá en contra tanto a la jueza como al Ministerio Público y a la defensa técnica”.
En lo que respecta, el obispo, de 56 años, fue detenido por la Policía el pasado 19 de agosto en Managua y puesto bajo arresto domiciliario, después de haber permanecido retenido durante varias semanas dentro de su curia. En ese entonces, el régimen de Daniel Ortega lo señaló de intentar "desestabilizar el país".
