El príncipe Harry pierde el recurso contra decisión de retirarle protección en Reino Unido
El príncipe Harry perdió el recurso presentado contra la decisión de retirarle la protección policial cuando se encuentra en el Reino Unido, anunció el miércoles el Tribunal Superior de Londres.
La justicia británica dictaminó que "no es irracional y no carece de injusticia" la decisión de retirar esta protección sistemática, pagada por los contribuyentes, desde que el duque de Sussex decidiera cortar sus lazos con la familia real en 2020 y marcharse a Estados Unidos.
El recurso de Harry contra el Ministerio de Interior rebatía la decisión tomada por las autoridades en febrero de 2020 de acordar una protección policial caso por caso a Harry, su mujer Meghan y sus dos hijos cuando estén en el Reino Unido.
En una audiencia en diciembre, la abogada de Harry argumentó que una decisión caso por caso "conlleva una incertidumbre excesiva" para el príncipe y las personas a su cargo.
El representante del Ministerio de Interior basó esta protección policial "a medida" y "dependiendo del contexto" en el hecho de su "cambio de estatus" en el seno de la familia real.
Pero el juez estimó este miércoles que esta decisión de caso por caso "tenía, y tiene, una base legal".
Gran parte de este proceso se desarrolló a puerta cerrada debido a la información confidencial de seguridad que se trataba.
En otro procedimiento, el príncipe Harry, que ahora debe contratar eventualmente seguridad privada, pidió poder contar con protección policial pagándola con sus fondos personales, pero la demanda fue rechazada por la justicia en mayo.
El hijo menor del rey no prodiga sus viajes a Reino Unido. En el último año solo ha realizado rápidas visitas para la coronación de Carlos III en mayo o a principios de febrero para visitar a su padre al que diagnosticaron un cáncer.
La cuestión de la seguridad es muy sensible para el príncipe Harry, que responsabiliza a la prensa y los 'paparazzis' del accidente mortal de su madre, la princesa Diana, en París en 1997.
El duque de Sussex también ha emprendido varios procesos legales contra los tabloides británicos.