Los mercados mundiales se desploman por temor a una guerra comercial a gran escala: hay caídas hasta del 13%
Este lunes 7 de abril, las bolsas de Asia y Europa se desplomaron por el temor a una recesión a escala global, generada por la decisión de Estados Unidos de aplicar grandes aranceles a sus socios comerciales.
Tras las enormes caídas del jueves y el viernes, las bolsas europeas vivieron una nueva jornada de caos por la guerra comercial. Hacia las 10h00 GMT, cabe detallar, el índice paneuropeo Eurostoxx 600 perdía alrededor del 5%.
A la misma hora sufrían caídas pronunciadas Fráncfort (-4,30%), París (-3,9%), Londres (-3,80%) y Madrid (-4,4%).
En pocos días, más de 1.500 millones de euros (1.640 millones de dólares) de capitalización bursátil se han esfumado en Europa.
En Asia, la bolsa de Tokio cerró en rojo (-7,8%), igual que las de Seúl (-5,6%), Sídney (-4,2%) y Taiwán (-9,7%).
Shanghái también se hundió (-7,34%) y en Hong Kong, el índice Hang Seng cerró con pérdidas del 13,22%, su peor resultado desde 1997, durante la crisis financiera asiática.
A partir del miércoles deberían entrar en vigor aranceles para los principales socios comerciales de la unión americana, incluyendo la Unión Europea (20%) y China (34%).
China, por su parte, ya anunció el viernes aranceles del 34% a todos los productos estadounidenses a partir del 10 de abril.
También impuso controles de exportación a siete minerales como el gadolinio, que se utiliza para las resonancias magnéticas, y el itrio, utilizado en productos electrónicos de consumo.
El sábado entró en vigor en Estados Unidos un impuesto universal a las importaciones del 10% y el miércoles aumentarán los gravámenes a las importaciones provenientes de algunos países, como los miembros de la Unión Europea (20%) y China (34%).
Trump afirmó el domingo que las violentas caídas de los mercados estadounidenses y mundiales mostraban que la "medicina" de su oleada de aranceles estaba funcionando.
"A veces tienes que tomar la medicina para arreglar algo (...) Los socios comerciales están viniendo a la mesa para hablar", sostuvo el mandatario estadounidense ante la prensa a bordo del avión presidencial Air Force One mientras regresaba a Washington de un fin de semana en Florida.