“Nos mintieron”: habló una de las denunciantes del caso de los jugadores del Real Madrid por escándalo de tipo sexual que involucra a una menor de edad
El pasado 14 de septiembre se conoció un caso que causó polémica en el mundo del fútbol luego de que la Guardia Civil de España detuviera a tres futbolistas que pertenecen a las categorías inferiores del Real Madrid por supuestamente haber difundido videos sexuales de menores por medio de WhatsApp.
Ahora, una de las víctimas del suceso relató lo que ocurrió ese día y que le cambió la vida al punto de tener buscar ayuda profesional.
La joven, de 18 años, le concedió una entrevista al medio madrileño AS en la que contó que desde el momento en el que dichas grabaciones empezaron a hacerse virales, su vida cambio por completo.
“Ahora necesito un psicólogo, más que nada, ayuda de una persona cualificada que me apoye y trate este tema porque no lo sé llevar sola”, afirmó.
La víctima, que se hizo llamar Sofía para mantener el anonimato durante la entrevista, relató que ella y sus dos amigas fueron invitadas a pasar el día en Amadores Beach Club, por lo cual llegaron al lugar sobre las tres de la tarde y hasta ahí todo iba bien.
“Básicamente, nosotras estábamos en la piscina privada y fueron transcurriendo las horas. Ellos estaban pidiendo bebidas y todo iba bien, cada uno estaba a su bola, hablando”, explicó.
Sofía añadió que, “tras un buen rato empiezan a pasar ‘cosas’. En un momento dado, mi amiga menor de edad y yo entramos al espacio que tiene cortinas y empezábamos los típicos juegos de estas edades, boberías”.
La mujer comentó que luego fue cuando sucedió lo que “está saliendo en las noticias y además es cierto (relaciones consentidas)”.
“Yo estaba con otro de los jugadores filtreando. Una tercera amiga con el otro futbolista, ese cuarto chico que se queda fuera, en la piscina general. No tuvieron nada que ver con lo que pasó. En un momento dado, durante los hechos, observé cómo uno de los chicos grababa a mi amiga. Primero vi el móvil y al mirar para otro lado observé cómo ese móvil se le pasaba a otro de los jugadores, como si de una mano fuera a otra”, puntualizó.
La joven agregó que no sabían si ese era el momento en el que las grabaron, pero que todas pensaron que, si habían sido grabadas y que mientras hablaban uno de los futbolistas, que han sido de apoyo, les dijo que “les iba a echar bronca”.
“Les insistió en que grabar a dos personas sin su consentimiento no estaba bien. Seguramente, en el momento en el que nosotras tres estábamos discutiendo se habrían pasado el vídeo por Instagram, WhatsApp”.
Sofía acotó que: “Mi amiga menor de edad y yo les pedimos que por favor borraran esos vídeos, y que además lo hicieran delante de nosotras, pero tanto de la galería como de la papelera del móvil. Nos enseñaron como cinco vídeos. Nos pusieron uno en el que se nos veía a nosotras dos de fondo y los borraron. ¿Pero qué pasa? Que en el momento en el que nosotras decíamos que teníamos que hablar con ellos les debió dar tiempo de mandar el vídeo a otros móviles, algo que claramente pasó”.
Otra, de las víctimas, comentó que no dijeron nada porque el novio de una de ellas es amigo de los implicados y les pidió no decir nada “para que ellos no le vieran como a un chivato. Fue un poco por proteger a la persona a la que le enseñaron ese vídeo y que ahora mismo es un testigo de ello”.
La joven explicó que tras eso y antes de saber que también aparecía en las imágenes que circularon por redes, no acudió a declarar porque no sabía si en un principio iba a ser víctima o testigo, pero que eso cambió cuando vio la declaración del novio de su amiga en la que él aseguró que ella salía en las grabaciones.
Sofía puntualizó que: “El día que me enteré y le comenté eso a nuestra amiga, le hablé a uno de ellos, que es con quien estaba mi amiga, diciéndole que me enteré de que ese vídeo había estado circulando, pero que esperaba que fuera mentira porque es algo denunciable y, además, aparece una menor de edad”.
Durante la entrevista afirmó que hay una gran diferencia entre que ella haya aceptado ser grabada, cosa que no hizo, y otra muy diferente a difundir un video íntimo suyo y de su amiga.
“Es un error que ellos han cometido, tienen toda la culpa. No se le quita la culpa porque han grabado y difundido. Nadie me va a hacer sentir mal si me dicen que me dejé grabar, que soy una fulana o que mi amiga está ahí siendo menor. Pasó y ellos tienen la culpa. No hay más. No hay que justificar que grabaran por cualquier bobería. Si lo hicieron son culpables y es lo que hay. Es la ley y tienen que caer”, puntualizo durante su conversación con AS.
Tanto ella como su amiga explicaron que les pidieron borrar el video, pero no lo hicieron y lo pasaron antes, por lo que “tienen todavía más culpa porque son conscientes de que eso está mal. Se les ha echado la bronca a los tres y aun así han seguido haciendo lo mismo. Es que nos mintieron”.
Para las afectadas este tipo de cosas pasan porque los futbolistas se sienten protegidos por pertenecer a grandes equipos o a importantes categorías en las que cuentan con seguridad y protección para hacer esto y pensar que les da igual, porque a la final serán protegidos de las repercusiones que puedan llegar a tener.
“Cuando estos chicos se ven con esta situación, el equipo les podría aportar todo. Les da igual hacer esto hoy o mañana. No quiero decir que todos sean así, pero desgraciadamente los hay así”.
Tras salir este caso a la luz, el Real Madrid emitió un comunicado, el pasado 14 de septiembre, en el que aseguró estar al tanto de la situación y que tomaría las medidas respectivas en el caso.
“El Real Madrid comunica que ha tenido conocimiento de que un jugador del Castilla y tres jugadores del Real Madrid C han prestado declaración ante la Guardia Civil en relación con una denuncia por la supuesta difusión de un vídeo privado por WhatsApp. Cuando el club tenga conocimiento detallado de los hechos, adoptará las medidas oportunas”, afirmó el club español.