"La noche transcurrió tranquila, el papa descansó": el Vaticano dio este domingo nuevo parte sobre Francisco
El Vaticano actualizó mediante una breve nota de prensa el estado de salud del papa Francisco este domingo 23 de febrero. La oficina de prensa de la sede de la Iglesia católica indicó que “la noche transcurrió tranquila” y que "el papa descansó”.
Sin embargo, el medio oficial del Vaticano, Vatican News, ofreció detalles de la condición de Francisco para la mañana del domingo.
“Esta mañana, el papa Francisco ha vuelto a utilizar nasales de oxígeno de alto flujo. Se están realizando más exámenes clínicos. Se esperan los resultados en el boletín de esta tarde”, mencionó Vatican News.
En medio de las últimas informaciones Francisco se pronunció con un mensaje en cuenta oficial de X en el que agradece por “los muchos mensajes de afecto” que ha recibido. “Y me han impresionado especialmente las cartas y dibujos de los niños. ¡Gracias por esta cercanía y por las oraciones de confortación que he recibido de todo el mundo!”, afirmó.
“Los exhorto a continuar con alegría su apostolado y a ser, como nos sugiere el evangelio de hoy, signo de un amor que abraza a todos, que transforma el mal en bien y genera un mundo fraterno. ¡No tengan miedo de “arriesgar el amor”!”, precisó en otro mensaje.
Las últimas informaciones sobre la salud del papa se conocen luego de que el sábado el Vaticano alertara que la condición de Francisco había empeorado con respecto a su estado del viernes.
La sede central de la Iglesia católica expuso que hubo un empeoramiento de las dolencias y cerró la comunicación con la lánguida frase de que el “pronóstico es reservado”.
Entre otras cosas, el Vaticano mencionó que en la mañana del sábado el papa Francisco “experimentó una crisis respiratoria prolongada similar al asma, que también requirió la administración de oxígeno de alto flujo”.
Explicó, a su vez, que los “análisis de sangre de hoy revelaron trombocitopenia, asociada con anemia, que requirió transfusiones de sangre”.
El parte del Vaticano del sábado, aunque corto, dio señales del estado en el que se encuentra el jefe máximo de la Iglesia católica al comparar su situación con una crisis de asma.
Mayo Clinic, portal especializado en salud, describe que un ataque de asma es un empeoramiento repentino de los síntomas del asma que incluyen “tos, silbido del pecho, opresión en el pecho y dificultad para tomar suficiente aire”.
“Estos síntomas aparecen porque los músculos que rodean las vías respiratorias se contraen, las vías respiratorias se irritan e inflaman, y el recubrimiento de las vías respiratorias produce un líquido llamado mucosidad. Todos estos factores causan dificultad para respirar”, menciona el portal.
El Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de Estados Unidos dice, por su parte, que los ataques de asma “en muchas personas comienzan por tos”.
“Es posible que tenga una sensación de presión en el pecho o como si tuviera a alguien sentado encima. Algunas personas dicen que se siente como si les sacaran el aire del cuerpo o como si intentaran aspirar aire a través de una pajita”, precisa.
La hospitalización de Francisco, de 88 años, que ha durado más de una semana ha reavivado la preocupación por su estado de salud, debido a que el pontífice pasó por una serie de problemas en los últimos años, desde operaciones de colon y del abdomen hasta dificultades para caminar.