La humanidad está en alto riesgo de volver a épocas primitivas: John Mecklin, editor en jefe del boletín de científicos atómicos
El reloj del juicio final fue diseñado para representar el peligro de que la humanidad se autodestruya. Fue creado en el año 1947 por un grupo de científicos internacionales que ayudaron paradójicamente a establecer las primeras armas atómicas, entre ellos Robert Oppenheimer.
El editor en jefe del boletín de científicos atómicos explicó lo que exactamente significa la medianoche, que según él puede llegar a tener diversas interpretaciones de cómo quizás una catástrofe acabaría con la civilización actual.
”Eso, no necesariamente implicaría la extinción de la raza humana, sino un escenario en el que nos veríamos obligados a vivir de manera primitiva, golpeando rocas, algo totalmente distinto a la forma en que vivimos ahora”.
Mecklin señaló que el consejo de ciencia y seguridad decidió mover el reloj del juicio final a 89 segundos para la medianoche afirmando que a la fecha ese es el punto más cercano que ha estado jamás.
Desde la creación del reloj del juicio final, a través del boletín de científicos atómicos se ha venido explicando el riesgo al que estaría sometida la humanidad ante, por ejemplo, el uso de armas nucleares.
“Lo que estaba diciendo tiene que ver, por ejemplo, con que podría haber una guerra nuclear general que matara, digamos, al 90% de las personas y arruinara la economía y el ambiente durante, decenas o quizás cientos de años. Eso no significaría necesariamente la extinción de la raza, pero sería un desastre”, advirtió.
El destacado periodista asegura que la recomendación de los científicos es que los líderes de los tres países más grandes y poderosos del mundo, Estados Unidos, Rusia y China deben sentarse y empezar a hablar sobre las amenazas actuales.