Benjamín Netanyahu da un paso atrás y aplaza la reforma judicial por masivas protestas en Israel
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, anunció que tomó la determinación de suspender el polémico proyecto de reforma judicial que pretendía implementar en el país.
La decisión se conoce luego de casi tres meses de crecientes tensiones, división política y protestas masivas contra la iniciativa, lo que ha sido catalogado como la crisis interna más grave que ha sufrido Israel en años.
"Por un sentido de responsabilidad nacional, por la voluntad de evitar una ruptura entre nuestro pueblo, he decidido pausar la segunda y tercera lectura del proyecto de ley", afirmó Netanyahu.
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Este lunes por la mañana, miles de personas se aglomeraron cerca del Parlamento en Jerusalén después de una declaración de huelga generalizada convocada por Arnon Bar-David, el jefe de Histadrut (mayor central sindical del país).
Algunos vuelos se vieron afectados, los hospitales cesaron varios de sus servicios y distintos diplomáticos se retiraron del trabajo.
Horas antes del discurso de Netanyahu, el presidente israelí Isaac Herzog pidió al Gobierno detener el proyecto “en nombre de la unidad del pueblo de Israel”.
Cabe mencionar que las tensiones aumentaron después de que Netanyahu decidió reemplazar al ministro de Defensa, Yoav Gallant, por pedir una pausa en el proceso legislativo de aprobación de la reforma.
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El proyecto pretendía incrementar el poder de los políticos sobre los jueces y disminuir el rol de la Corte Suprema, según analistas.
Sus detractores consideran que la reforma representa una amenaza para la separación de poderes y el carácter democrático del Estado de Israel.
El rechazo al proyecto generó en los tres últimos meses uno de los mayores movimientos populares de protestas de la historia del país.
