Colegio en Argentina donde el papa impartió clases es acusado de encubrir abusos sexuales
Gonzalo Elizondo y Pablo Vio, dos estudiantes del Colegio del Salvador en donde el papa Francisco impartió clases, denunciaron tras casi dos décadas que habían sufrido abuso sexual cuando tenían 11 años por parte de su tutor en ese entonces, el hermano César Fretes.
Elizondo y Vio, ambos de 32 años, tras darse cuenta de que compartían el mismo recuerdo doloroso decidieron buscar respuestas por lo que se acercaron al colegio para comentar lo sucedido. La institución reconoció los hechos y les ofrecieron disculpas en privado.
No obstante, el colegio jesuita les informó a los hombres que al igual que ellos hubo otras familias que durante años se acercaron a la institución para denunciar abuso sexual por parte de Fretes, quien hasta 2003 se desempeñó como profesor y tutor de los estudiantes de último año de primaria.
En 2003 el religioso fue trasladado a Mendoza, lugar en el que murió de cáncer, tras las acusaciones de un grupo de padres que alegaron frente a Fretes que el hombre había abusado sexualmente de varios niños.
El número de víctimas que se han podido conocer hasta ahora, debido a la investigación de Elizondo y Vio, es de 42 niños abusados por el tutor. Por su parte, el colegio emitió un comunicado el pasado 16 de julio en el que se disculpaban y les pedían perdón a los afectados.
La institución también afirmó que el traslado que realizaron del profesor a Mendoza no se debió a un encubrimiento por su parte como aseguraban los padres de familia.
Álvaro Pacheco, delegado de Prevención de Abusos de los jesuitas, aseveró que “el rector del colegio y el delegado de Prevención de la Provincia publicaron el 16 de julio una carta a la comunidad educativa y a la opinión pública, lamentando profundamente lo ocurrido y pidiendo perdón a todas las víctimas”.
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Pacheco también afirmó que están abiertos a que más testimonios salgan a la luz y que “buscaremos también crear algún espacio para que la palabra pueda circular entre todos los que quieran expresarse”.
Aunque Pacheco emitió dicha misiva, también enumeró los motivos por las que rechaza el reclamo realizado por las víctimas y sus familiares. Entre las razones destacó que “las autoridades de aquel tiempo procedieron como correspondía de acuerdo con las normativas penales (estatales) y canónicas vigentes en esos años. En consecuencia, no hubo encubrimiento dado que la ley vigente en aquel momento no facultaba a las autoridades del colegio a hacer la denuncia”.
Fretes falleció en 2015 sin haber sido denunciado ante la Justicia y aunque las autoridades del colegio reconocieron los hechos insisten en no ofrecer disculpas públicas y se niegan a dar compensación económica a los afectados.
El silencio del papa
Jorge Mario Bergoglio, el papa Francisco, es de formación jesuita e impartió clases en el Colegio del Salvador a mitad de los años setenta. Gonzalo Elizondo esperaba que, debido a los discursos de Francisco sobre la pedofilia, el religioso intercedería, pero no fue así.
Por ello, en 2020 decidió escribirle una carta al Vaticano; sin embargo, no obtuvo respuesta. Pablo Vio señalo al medio El País que lo que en realidad quiere la iglesia es que se cansen y no terminen de hacer las denuncias respetivas para que así ellos puedan “taparlo como si nada”.
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“Si el Papa saliese a hablar nadie podría seguir haciéndose el distraído y nos daría una recarga de energía, no va a pasar”, explicó Vio a el portal La Tercera.
Tras el silencio del papa, los exalumnos que buscan Justicia y reparación económica afirman que se han vuelto muy críticos con “la actuación de las autoridades de la institución jesuita donde estudiaron y de toda la jerarquía católica”.
Redacción ntn24.com
