Maestros venezolanos desafían amenazas de colectivos y vuelven a las calles en demanda de aumentos
Maestros y trabajadores del sector educativo en Venezuela regresaron a las calles este lunes 16 de enero, en otra jornada de protesta nacional en la que exigen reivindicaciones laborales y la dolarización del salario.
Varios sectores han planteado un paro nacional como medida de presión para que el Ejecutivo se siente a revisar el ajuste sueldos y salarios para todos los empleados públicos.
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Este domingo, se viralizó un video protagonizado por integrantes de grupos armados afectos al chavismo, conocido como colectivos, quienes amenazaron a los docentes que salgan a protestar en Maracay, estado Aragua.
“Estaremos monitoreando esas tomas en Maracay y en diferentes municipios. Estamos al tanto y estamos alerta, dispuestos a salir a defender las calles y la paz de nuestro país”, dijo.
Pese a las amenazas, los maestros mantienen sus exigencias. Denuncian una situación laboral "alarmante" por bajos salarios.
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Mientras tanto, el régimen venezolano depositó un bono de 580 bolívares, equivalente a 28,82 dólares según la tasa oficial de este 16 de enero, por la celebración del Día del Maestro. Acción que catalogan de “burla”.
“Este bono no tiene que ver con nuestras exigencias, por lo tanto, no es más que una dádiva que representa lo negado que está el gobierno ante los trabajadores, en especial el educador, que en este momento está exigiendo una contratación colectiva ajustada a los artículos 91 y 89 de nuestra Constitución”, dijo Raquel Figueroa, especialista en Políticas Educativas y dirigente sindical de Fenaprodo-CPV, a Efecto Cocuyo.
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Por su parte, Nicolás Maduro aseguró que está para “oír las exigencias y servir a los hombres y mujeres que luchan a diario por la Patria”, situación que parece quedarse en promesas.
La Iglesia católica también manifestó una gran preocupación por la crisis económica y la desigualdad social que experimentan los venezolanos. A través de un comunicado repudió lo que considera como la desvalorización de la actividad educativa.
“Sin duda, padecemos con ustedes el menosprecio y la desvalorización de la actividad educativa. Nos preocupa mucho el nivel educativo deficiente fruto de tantas causas, entre otras, la migración y la burocratización que ha sufrido esta actividad tan noble”, reza el escrito de la Conferencia Episcopal Venezolana.
